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¡Llegó el momento tan esperado! Te llamaron o te enviaron un correo electrónico confirmando una entrevista para el trabajo que tanto deseabas. Es normal sentir emoción y nervios en esta situación, pero no te preocupes. Acá te brindamos una serie de consejos para que puedas prepararte, sentirte seguro y destacarte al máximo.

1. Investigá: Lo primero que tenés que hacer es investigar sobre la empresa. Lee sobre sus actividades, servicios, clientes y también indagá un poco sobre su historia. Asegurate de comprender en qué consiste el puesto para el cual te estás postulando. Esto te permitirá demostrar un mayor interés y conocimiento durante la entrevista. Además, podrás adaptar tus respuestas para que estén alineadas con los valores y la misión de la empresa.

2. Anticipate: Practicá en voz alta lo que vas a decir si te preguntan acerca de vos mismo o de tu experiencia laboral. Prepará ejemplos concretos que demuestren tus habilidades y logros relevantes para el puesto. También pensá en situaciones desafiantes que hayas enfrentado y cómo las resolviste. Cuanto más te prepares, más confianza vas a tener durante la entrevista y podrás responder de manera más efectiva.

3. Sé puntual: Es fundamental llegar a tiempo a la entrevista. Calculá bien el tiempo de desplazamiento y asegurate de tener en cuenta posibles contratiempos, como el tráfico o dificultades para encontrar estacionamiento. Llegar unos minutos antes de la hora acordada demuestra puntualidad y compromiso. Si llegás tarde, es posible que causes una mala impresión y te genere estrés adicional.

4. Sé honesto: Es importante ser sincero en todas tus respuestas. No trates de impresionar al entrevistador con información falsa o exagerada. Si no tenés experiencia en ciertas áreas, sé honesto al respecto, pero enfatizá tu disposición para aprender y tu entusiasmo por adquirir nuevas habilidades. La honestidad y la autenticidad son cualidades valoradas por los empleadores.

5. Hablá sobre tu potencial de aprendizaje: Los empleadores buscan candidatos dispuestos a aprender y adaptarse a nuevas situaciones. Destacá tu capacidad para adquirir nuevos conocimientos y habilidades rápidamente. Mencioná experiencias anteriores en las que te enfrentaste a desafíos y cómo los superaste mediante el aprendizaje y la mejora continua.

6. Hablá sobre tus habilidades blandas: Además de evaluar tus habilidades técnicas, los empleadores también valoran otro tipo de habilidades. Mostrá tu capacidad para trabajar en equipo, comunicarte de manera efectiva, resolver problemas en colaboración con otros, capacidad de adaptabilidad, pensamiento crítico, liderazgo, entre muchas más . Si tenés ejemplos concretos de situaciones en las que demostraste estas habilidades, compartilas durante la entrevista.

7. Practicá tu lenguaje corporal: Tu lenguaje corporal también es importante durante una entrevista. Mantené una postura erguida y confiada, mantené el contacto visual con el entrevistador y sonreí de manera genuina cuando sea apropiado. Evitá gestos nerviosos o inquietos, como tamborilear los dedos o mover las piernas constantemente. Podés encontrar más información al respecto acá.

8. Hacé preguntas: Prepará algunas preguntas para hacer al entrevistador al final de la conversación. Esto demuestra tu interés y te brinda la oportunidad de obtener más información sobre la empresa y el puesto. Podés preguntar sobre las responsabilidades específicas del trabajo, la cultura de la empresa, oportunidades de crecimiento o cualquier otro aspecto relevante para vos. Evitá preguntas relacionadas exclusivamente con el salario o los beneficios, ya que es mejor abordar esos temas en una etapa posterior del proceso de selección.

Mantené la calma y evitá la ansiedad en los días posteriores al encuentro. Asegurate de tomar notas sobre la entrevista para recordar los detalles importantes. Si no te informaron sobre los plazos de selección, esperá al menos una semana antes de enviar un correo electrónico para consultar el estado del proceso.

Recordá que cada entrevista es una oportunidad de aprendizaje, incluso si no obtenés el trabajo. Analizá tu desempeño, identificá áreas de mejora y continuá desarrollándote profesionalmente.

Si pasaste a la segunda entrevista no dejes de revisar estos tips.